Un nuevo 8 de marzo llega a nuestras vidas. Como cada año, las Juventudes Socialistas de España nos sumamos a la reivindicación del Día Internacional de la Mujer y volvemos a mostrar nuestro compromiso firme con la igualdad plena entre mujeres y hombres, una igualdad que debe ser efectiva como pilar fundamental para el avance de nuestra sociedad y la consolidación y mejora de los sistemas democráticos.
Bajo el lema “Por un futuro igualitario en el mundo de la Covid-19”, Naciones Unidas pretende acercar y hacernos conscientes de la realidad vivida por las mujeres durante este último año. Un año marcado por una pandemia mundial, algo insólito y nunca vivido por las últimas generaciones. Una situación de crisis sanitaria global que ha visto trastocadas nuestras vidas, más allá del ámbito laboral, económico y social. Durante estos últimos meses, las mujeres han sido la punta de lanza frente a la lucha contra la COVID-19, ya que son ellas quienes, en más de un 70%, ocupan la mayoría de puestos del ámbito sanitario. Pero también han sido muchos y muy importantes los logros conseguidos por ellas en el campo de la ciencia, la investigación o los servicios esenciales, así como la gran labor desarrollada en el ámbito de los cuidados, aún hoy ocupado casi en su totalidad por las mujeres, ya sea en la empresa o en el seno de la familia.
La crisis devenida por la pandemia ha tenido un eslabón especialmente damnificado, y es el que conforman las mujeres. Son ellas quienes más han sufrido la pérdida de empleo, bien a través de los ERTES, o con unas mayores trabas a la hora de conseguir alcanzar sus objetivos en el ámbito de la empresa o el emprendimiento. Y esto es porque han tenido que dedicar más del doble de tiempo que los hombres en tareas como el cuidado de los hijos/as o de los mayores del ámbito familiar, así como a las tareas del hogar, en detrimento de su propio crecimiento y desarrollo profesional y personal. La situación de las jóvenes preocupa especialmente a nuestra organización, las altas tasas de paro, la inestabilidad y precariedad de los primeros empleos, la brecha salarial que todavía nos asola y la dificultad para emanciparse hacen que las mujeres jóvenes de nuestro país no puedan seguir avanzar en sus proyectos vitales.
No podemos obviar, además, la gravedad de aquellos casos en los que las mujeres víctimas de violencia de género se han visto obligadas a compartir su hogar durante los momentos más duros del confinamiento con sus agresores.
La COVID-19 ha dejado en evidencia de nuevo el papel fundamental de la mujer en la sociedad. Si bien es cierto que constituyen la mayoría del personal de primera línea, su presencia en los espacios de toma de decisiones y poder sigue siendo más que insuficiente y minúsculo en comparación con los hombres presentes en los mismos.
Desde las Juventudes Socialistas de España defendemos que hay que intervenir para paliar esta situación. Muestra de ello es el trabajo realizado por las compañeras y los compañeros del PSOE, que desde sus respectivas responsabilidades, están trabajando día a día para que esta crisis no deje a nadie atrás y tampoco se lleve por delante a las mujeres. Contamos con la gran oportunidad que suponen los fondos europeos de recuperación, que nos dan la posibilidad de invertir con audacia para generar y establecer cambios estructurales.
Desde las JSE, reivindicamos la necesidad de seguir elaborando políticas dirigidas a cerrar las muchas brechas que nos quedan aún pendientes, como la laboral y salarial, la brecha digital o la brecha de corresponsabilidad. Políticas pensadas y dirigidas a la consecución de la corresponsabilidad y el fin de las situaciones de desigualdad de las mujeres desde el ámbito rural al investigador y tecnológico. Es de vital importancia la actuación de forma transversal para diseñar mecanismos útiles y certeros que permitan erradicar la desigualdad y el progreso de las mujeres en todos estos ámbitos.
Creemos que la elaboración y ejecución de políticas dirigidas a combatir la pobreza infantil y la de muchas mujeres con hijos e hijas a cargo sigue siendo más necesario que nunca. Políticas contra la prostitución y la trata de mujeres y niñas, contra todo aquello que supone un ataque frontal a los derechos humanos.
Como jóvenes socialistas que somos, somos consciente de la importancia que conlleva el mantener una visión europea e internacionalista de nuestros planteamientos. La agenda europea en materia de defensa y progreso de la igualdad ha de seguir desarrollándose, aumentando los recursos destinados a políticas de igualdad e incrementando las exigencias en la normativa comunitaria para el avance de las mujeres europeas. Además, no dejaremos de reivindicar la necesidad de conseguir la igualdad formal en aquellos países donde esta sigue siendo una meta bastante lejana. Seguiremos abanderando la defensa de los derechos de las mujeres y las niñas, derechos humanos al fin y al cabo, entre los que destacan la abolición de la mutilación genital femenina, el fin de los matrimonios forzados, el acceso a la educación, la sanidad, etc. Y nos comprometemos con millones de mujeres en el mundo que aún tienen negado el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo.
En el año en el que se conmemora el 90 aniversario de la consecución del 90 aniversario del voto de las mujeres en España., queremos reconocer a las que nos allanaron el camino con su trabajo, esfuerzo y valentía, como Clara Campoamor. Un logro y una efeméride que ni el oscurantismo de 40 años de dictadura pudo borrar. Como recoge el PSOE en su manifiesto para este día: “Con el voto femenino completamos nuestra democracia. Con la democracia, las mujeres fueron desde el primer momento conscientes de que tenían ante ellas una extraordinaria oportunidad y que era fruto de lo que habían trabajado otras antes. Clara vino de la mano de Pardo Bazán, de Concepción Arenal, de tantas otras mujeres que la precedieron y de quienes recoge su testigo.
De ellas, heredamos un feminismo que tiene que ver con los derechos humanos, con la democracia, con la ciudadanía, con la racionalidad del proyecto humanista ilustrado al que pertenecemos y del que nacen todas las democracias contemporáneas”.
Las Juventudes Socialistas de España siempre hemos hecho nuestra la agenda feminista, porque no se puede ser socialista sin ser feminista. Es una seña de identidad de nuestra organización, la fuente de la que mana nuestra lucha. Una lucha que este 2021 cobra, si esto es posible, más importancia, en mitad de clima de crispación y desprecio por parte de la ultraderecha patria hacia las mujeres, la libertad y la igualdad. Mientras su discurso de odio avanza incansable contra el feminismo, es más necesaria que nunca la alianza de todas las mujeres progresistas para no dar ni un paso atrás en los derechos conquistados y seguir avanzando en la agenda feminista.
Desde JSE trabajamos por encontrar espacios comunes que denoten la importancia de apostar por las mujeres, especialmente por las más jóvenes, para tener una democracia sana y de futuro en el que la mitad de la población no se vea excluida. Porque para avanzar como país es necesaria una igualdad efectiva y real que reconozca las oportunidades que tantos años se han negado a las mujeres.
Desde la llegada de la democracia a nuestro país, las y los socialistas hemos estado siempre al lado de las mujeres, reivindicando la igualdad y actuando al favor de su consecución desde las instituciones. Los avances en materia de igualdad en España han llevado siempre en España el sello socialista.
Son aún muchos los objetivos por alcanzar, los obstáculos a superar y los desafíos que tenemos por delante. Por eso hoy, 8 de marzo, las Juventudes Socialistas de España reivindicamos la necesidad de unir fuerzas este #8MJuntasEnRed.