Durante la jornada de ayer, en Twitter, una de las redes sociales más relevantes, se produjo un hecho reprobable: Personas desde distintos puntos de España, pero también desde latinoamérica y algunos otros lugares del mundo, publicaron textos en este medio con la etiqueta (hashtag) #SacrificaUnHomosexual.
Para la organización juvenil socialista este hecho “es un grave ataque contra las personas LGTBI de todo el planeta y asimismo, reconocen que es una peligrosa difusión del odio por razón de orientación sexual”. Las expresiones de odio o el discurso destinado a intimidar, oprimir o incitar al odio o la violencia contra una persona o grupo en base a su orientación sexual, cabe recordar que es una de las condenas recogidas entre los principios de los derechos humanos de las Naciones Unidas.
Para el Secretario General de las Juventudes Socialistas de España, Nino Torre, este hecho en un medio contemporáneo es ‘totalmente inexplicable porque Twitter debería velar por cumplir con los principios morales y éticos no permitiendo la difusión de este tipo de mensajes. El límite de la libertad de expresión está en la incitación al odio, en un país, España, que, aunque el rechazo solo lo representa una minoría, ha tenido últimamente demasiados casos de violencia contra parejas homosexuales, por lo que se hace más importante aún la responsabilidad que la empresa tiene sobre los contenidos que se publican’.
Por su parte, el Coordinador LGTBI Estatal de JSE, Javier Barrionuevo, ha declarado que ‘a pesar de vivir en un país que reconoce en un 88% a las parejas del mismo sexo, siendo el primer país a nivel mundial en aceptar socialmente la homosexualidad, surgen movimientos de este tipo que no hacen ninguna justicia a la ciudadanía española’. En el mismo sentido, el joven socialista ha añadido que ‘ya es hora que Rajoy saque del cajón la Ley de Igualdad de Trato que los socialistas hemos presentado en dos ocasiones. Puede ir a todas las bodas gais que quiera pero: caminante, no camino, se hace camino al andar; que se aplique el cuento y reconozca que los crímenes que incitan al odio tienen que ser condenados a todos los niveles’.